ⴲLa Mujer del Bosque (Seqvere Vestigia)

martes, 19 de diciembre de 2023

La bruja que no sabe matar...




Conocí durante un tiempo a una Pseudo-bruja del Cerco -una de tantas, porque últimamente se reproducen como el moho- que decía: "La bruja que no sabe matar, ni puede ni sabe curar" -frase copiada de una autora famosa- Bien, hoy os hablaré de lo que muchos llaman "Magia Negra y Magia Blanca", que viene muy bien con la frase que os acabo de enseñar. En mi Oficio, la Magia no tiene color determinado, existe lo que se denomina luz y oscuridad, trabajos oscuros o luminosos.

Si no se sabe manejar uno, no se sabe manejar el otro. Juntos, luz y oscuridad se dan la mano. No existe blanco o negro, sino la ética personal. Plantearse si esto es "bueno" o "luminoso" y si esto es "malo" u "oscuro" es plantearse una atadura que nosotras, las brujas de Cobertura, Cerco o Hedgewitch, como quieras llamarnos, ni conocemos ni tenemos. La conciencia personal es la que nos hace conducirnos de una manera u otra, pero nada impide que, si nos hacen daño, hagamos daño. Y nada impide que si nos hacen bien, hagamos bien. El karma, las leyes de retorno, de atracción y demás son conceptos que ni caben ni se conocen dentro del Cerco. Es tu corazón el que lo mueve. Y el corazón es humano, no religioso.



Cuando hablamos y cantamos hechizos de palabra lo hacemos movidos por un sentimiento poderoso como es la ira o la furia, la paciencia o la serenidad, lo que hacemos simplemente verbalizándolo tiene más poder que cualquier ingrediente sagrado en el mundo. El Poder de la Palabra es la máxima expresión dentro del Cerco... y como máxima expresión, es la máxima bendición o la máxima maldición. Cuidado con cómo la manejamos.

La Magia no tiene color. Es lo que hacemos con ella. El Equilibrio es nuestra máxima premisa para que nuestro Oficio se manifieste en todo su esplendor, tanto positivo como negativo. Somos Luz y Oscuridad, Claras y Oscuras. Somos un reflejo de lo que más veneramos: la Naturaleza. La misma que hace desaparecer con tornados, terremotos y maremotos extensiones enteras. La misma que hace crecer vida allí donde solo hay muerte. La que destruye y construye. Ni buena ni mala, porque bondad y maldad son conceptos religiosos humanos. Somos lo que somos, y tan solo el Equilibrio nos hace mantenernos en nuestro centro. Con el poder de nuestra palabra igual podemos destruir cuanto a nuestro alrededor se enuentra, del mismo modo que con nuestros gestos podemos hacer que la vida florezca. Somos parte del mismo Cosmos que crea agujeros negros y hace desaparecer océanos de tiempo, el mismo Cosmos que genera un movimiento único del cual emerge la vida... Negar la Oscuridad dentro del Oficio, así como su propia Luz, es un grave error que se comete la mayoría de las veces. Como en todo, la Magia mantiene su dualidad: no es blanca, no es negra. No es maléfica, no es benéfica. Es todo y es nada, y solo en su Perfecto Equilibrio se encuentra sentido a su existencia y, por ende, a la nuestra. Negar lo evidente es cerrarse a la verdad, taparse los ojos con una venda que constantemente se está cayendo. Es en el corazón de la Hedgewitch donde se encuentra el verdadero color, la Magia por sí misma sólo es Magia.
 
Conocer todo aquello que está a nuestra disposición nos hace más sabios, negar que existe aquello que nos incomoda nos hace más necios. Yo enseño, muestro, indico qué es Oscuro y qué es Luminoso. Pero eso no quiere decir que lo practique todo el tiempo, más bien al contrario... sin embargo, ¿cómo pretender curar si antes no se sabe matar? ¿Cómo pretender hacer el bien si no se distingue cuál es el mal?... mil veces he visto cometer actos terribles y atroces dentro del Oficio con justificaciones basadas en "he sufrido mucho", "se lo merece, me ha hecho daño" o "es justo". Soy Hedgewitch. Sé dónde está el Equilibrio, porque es precisamente el Equilibrio mismo el que me dicta lo que debo o no debo hacer, no los movimientos y palpitaciones del corazón. 
No puedo saber cómo cura una planta si antes no sé sus componentes nocivos. No puedo lanzar un hechizo de lluvia si luego sé que voy a desequilibrar ese mismo agua en otra parte. No puedo aludir a la justicia llorando por una injusticia si estaba en mi Camino como aprendizaje. No puedo pretender quién no soy, no puedo caer pendiente de mil reglas y mis leyes si luego las quebranto al menor sollozo.

Mi Oficio me completó. Allá donde había vacío, comprendí y entendí cuál era la causa de mi existencia... soy Oscura, y soy Clara, y soy justa, y acepto un embate, una derrota, pero jamás pongo gratuitamente la otra mejilla. No juego con las energías. Aprendo y soy una con la Naturaleza.
Por encima de dogmas y principios varios.

Texto y foto:
©Lola Rodríguez (La Mujer del Bosque)
©Todos los Derechos Reservados
http://www.safecreative.org/work/1802045684257-la-bruja-que-no-sabe-matarLa bruja que no sabe matar - CC by-nc-nd 4.0 - Lola Rodríguez


Y por último... Si vas a copiar este artículo, menciona su autoría y no quites mi firma

2 comments:

Siempre Me a Encantado Lo Que Escribes, a Veces No Entiendo, Busco Ayuda Con Algunas Palabras. Pero Tienes "La Magia" Que Transporta a Uno Con Tus Letras.

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